Los Patitos Feos del Software Español 26 (I): «Patitos» a cinco duros

Artículo original de The Punisher, publicado en su blog.

A finales de los años setenta, el furor de las máquinas recreativas (o “de los bares”), estallaba en nuestro país. La industria Española, no quiso quedarse atrás, y de los más oscuros rincones de la “Piel de Toro”, aparecieron una serie de compañías de distribución y programación de juegos, que por desgracia no pasaron a la historia.

Con la honrosa excepción de Gaelco (de los que también voy a hablar, por que se lo merecen), es difícil que nos acordemos de otras recreativas españolas, salvo algunos juegos sueltos, como los de Cidelsa o Tecfri de los que a duras penas recordamos de que compañía son.

A todas estas compañías, que lucharon por abrirse un hueco en el mercado de los “cinco duros”, y muchas de ellas se quedaron en el camino, está dedicado este patito, sin duda el más extenso y el que más “ilu” me ha hecho escribir, desde hace mucho tiempo.

Meted la moneda y… ¡Push Player One To Start! 😀

NOTA: En este artículo, y para evitar meollos, no voy a poner el enlace a ninguna de las ROMS,salvo la del World Rally que ha sido liberada por Gaelco, con el resto de juegos podéis probar suerte en Internet.

Tampoco he incluido los juegos que aún no están emulados correctamente, por razones obvias, si no puedo jugar con ellos, no puedo hablar de ellos.

NOTA 2: Por incompatibilidades de mi configuración de PHP la cual no puedo tocar (¡Gracias Aruba.it! 🙁 ), he tenido que dividir este artículo en dos para que se mostrara correctamente. Encontraréis el enlace a la segunda parte al final de la página. Si en un futuro me solucionan el problema fusionaré las dos partes en una.

Los Pioneros

Si sois tan viejetes como yo, muchos de vosotros recordareis las recreativas “en Español” de los ochenta, versiones en castellano de juegos como Galaxian o Pacman, realizadas por empresas como Petaco o Sonic, que no eran más que hackeadas o “bootlegs” (probablemente sin licencia) de los juegos originales. Entre esta maraña de oportunistas, algunos laboratorios de electrónica se atrevieron a producir sus propias creaciones, seguramente, estos fueron los primeros videojuegos creados en España.

Aunque recientemente, Javier Valero de Gaelco, reveló que antes de los juegos de CIDELSA hubo una primera placa de máquina recreativa en España, lo cierto es que oficialmente, la empresa CIDELSA, se puede considerar como la primera empresa de videojuegos de España. Sus juegos no son ninguna maravilla, y reflejan sin duda las modas del mercado en aquel entonces, pero reconozco que tuvieron algunas ideas muy interesantes.

Los juegos de CIDELSA rescatados, son tres, aunque existe una cuarta placa de la compañía perdida por ahí.

1- Destroyer (1980)

  • Tipo: Matamarcianos por oleadas
  • Equipo: Electrónica Funcional Operativa

Esta claro, que a la gente de EFO, les encantaba Phoenix, porque esta recreativa tiene muchos puntos en común con el arcade de Amstar.

Destroyer es uno de esos matamarcianos en el que tenemos que ir superando una serie de oleadas de distintos enemigos. Lo que distingue principalmente a Destroyer, del resto de “tocayos” de la época, es la mala leche con la que nos atacan los enemigos, sobretodo en lo que se refiere a las balas, que pasan de ser, simples disparos rectos a balas en diagonal y en las fases más avanzadas, los misiles cambian de trayectoria a medio camino, convirtiéndose en auténticos “Hijos del Demonio”, siendo mucho más fácil todo si nos preocupamos por las balas y simplemente disparamos a gogó contra los enemigos.

Si logramos sortear con un poco de intuición y telepatía los ataques, llegaremos a una fase en que nuestra nave se sitúa en el centro de la pantalla y nos vienen naves desde cualquier punto de la pantalla, todo un martirio incluso para los más hábiles, es la típica fase que parece pensada para chuparnos los cinco duros.

Enemigo Pobretón 0: Bala hija de su Madre 10

Destroyer es un juego que no se destaca especialmente en nada salvo en la mala leche de los enemigos, pero no me voy a quejar, teniendo en cuenta de que año estamos hablando.

2- Draco (1981)

  • Tipo: Matabichos al estilo Berzerk
  • Equipo: Electrónica Funcional Operativa

Para su segundo arcade, los de EFO, se inspiraron en otro clásico de la época, “Berzerk“, pero con algunos cambios, que hace que “Draco“, sea algo distinto al juego de Stern, como por ejemplo el desarrollo de las fases.

Con lo que me ha costado apilar todo, y ¡no vienen los de la mudanza!

En la primera fase, tenemos que desintegrar una especie de círculos ovalados, agrupados alrededor de unos números que representan la puntuación, si logramos destruir los círculos que los rodean, automáticamente ¿destruiremos?, la puntuación. Cuando hayamos eliminado todo pasaremos de fase.

Por supuesto, nos persiguen los enemigos de turno, que son algo así como símbolos de copyright, van muy rápido y tienen bastante mala leche.

Después de la cruz y el mareo de scroles bruscos que supone pasar la primera fase, llegaremos ala segunda, en la que los números (o tesoros como les llaman sus programadores), están desperdigados por una especie de laberinto cutrillo, y tenemos que destruirlos directamente.

El número está enladrillado… ¿quien lo desenladrillará?

La tercera fase es parecida a Pacman, pero podría llamarse “Paralytic Man contra los corchetes asesinos“, que es lo que son los enemigos.. y como nuestro personaje no tiene ni un solo cuadro de animación, he ahí la similitud. El objetivo es simple, comer todos los puntitos, sin que nos agarren los símbolos ortográficos.

¡Quien me mandaría comprar esa alfombra de oferta!

A partir de este punto, las dos fases siguientes ya repiten el desarrollo de las anteriores, pero con más mala leche si cabe.

El juego no destaca ni por gráficos ni por sonido, ni siquiera teniendo en cuenta el año en el que está producido, ya que un año antes, el mismo Berzerk contaba con animaciones en el personaje central.

Además de esto, los pasos de pantalla se hacen con un scroll en exceso brusco, que incita a que nos despistemos y que nos comamos a los enemigos, óvalos y “tesoros”.

Por suerte Draco cuenta con un “continue”, que nos devuelve al mismo punto exacto de la fase en que nos habíamos quedado.

3- Altair (1980)

  • Tipo: Matamarcianos por oleadas
  • Equipo: Electrónica Funcional Operativa

Si Altair fuera una recreativa de Taito o Nichibutsu, seguramente estaríamos hablando de una de esas máquinas que marcaron un antes y un después en los matamarcianos, con ideas originales e innovadoras, pero por desgracia no fue así. Y no lo fue, porque sigue las pautas que marcarían los juegos españoles de la década de los ochenta, “bueno, bonito e injugable”.

¿Que es lo que mola de Altair?, pues bastante cosas, que no se habían visto hasta la fecha, o por lo menos, no habitualmente. En primer lugar, la nave se controla en ocho direcciones distintas, y la podemos mover por toda la pantalla, con la particularidad de que podemos darle la vuelta en cualquier punto de la pantalla y disparar hacia abajo. Además, si los enemigos nos dan a los costados de la nave, sólo perderemos la parte afectada por el impacto, no la nave entera, lo que es muy de agradecer.

¡Como se nota que hemos visto Star Wars!

El resto, es bastante estándar; oleadas de enemigos distintos (algunos inspirados en otros juegos o en películas de la época), y un jefe final, popularmente conocido como el “Cabezón”, al que se le destruye de manera sospechosamente parecida a la nave nodriza de Phoenix.

Las naves, como tiene que ser un un juego de CIDELSA, tienen una mala leche impresionante a la hora de dispararnos, con gran variedad de patrones de trayectoria, tantos que casi parece que tengan inteligencia.

Pajaritos a bailar, la colita remover, y la nave destruir….

Gracias a un vídeo grabado por uno de los foreros de la difunta Marcianitos.org, os podéis hacer una idea de la pinta del juego en acción…

Especializada principalmente en Pinball (o máquinas del Millón), IDSA (Ideas y Diseños, Sociedad Anónima), tuvo un fugaz y muy poco productivo paso por el mundo de las recreativas, con solo un juego completamente desfasado para su época

1- 4 En Raya (1990)

  • Tipo: Juego de Mesa, Arcade
  • Equipo: Luis Gosalbez Carrasco

Viendo la pinta de las pantallas, a uno le cuesta creer que esta recreativa se programó en 1990, año en que disfrutábamos de cosas como Alien Storm.

Efectivamente, 4 En Raya está realizada en un placa con un Z80 (a lo mejor compraron en el Rastro el kit de desarrollo), y eso salta a la vista, de hecho, parece un juego de Amstrad CPC.

Una «recre» de los 90, con pinta de los 70..

El desarrollo, es el que nos podemos esperar para una máquina de “4-en-Raya”, pero para que fuera un poco más entretenida el programador le agregó una serie de cosas que la hacen mucho más “arcade” el juego.

En primer lugar, podemos fastidiar al contrario, disparando flechas o tiros (dependiendo del jugador que llevemos), para destruir las “fichas con ojos” del contrario mientras caen, y así hacerle perder el turno. Además, conforme vamos pasando pantallas, veremos aparecer una serie de obstáculos como gusanos, arañas… que nos impedirán poner las fichas en los carriles correspondientes.

La idea, como veis, no está mal del todo, pero la pinta cutre-salchichera del juego no incita a jugarlo, imaginaos si nos encontramos esto en una sala de principios de los 90, al lado de los primeros juegos de Neo Geo o de Out Run… vamos, como para no hacerle ni caso.

Seguro que si sois viciosillos de las máquinas tragaperras, no os será indiferente el nombre de “Recreativos Franco”, pero si os digo que también tuvieron un par de recreativas, seguro que ya no os suena. Las dos máquinas de esta gente, siguen en su línea habitual, (son feas de narices), y tuvieron versiones variadas, básicamente con una placa se hicieron recreativas de varios juegos de Azar, como dados, póquer, o bingo, aquí tenéis un par de ejemplos…

1- Baby Dado (1987)

  • Tipo: Juego de Dados
  • Equipo: Recreativos Franco

Simple y llanamente, Baby Dado es una versión “computarizada” de el famoso juego Yahtzee, muy parecida a la versión de Mac con que tantas horas perdía DeLucar en Súper Juegos.

Me apuesto la cena, a que me aburro en menos de cinco minutos.

2- Baby Poker (1987)

  • Tipo: Vídeo Póquer
  • Equipo: Recreativos Franco

Otro que es bastante obvio por el nombre, y que usa exactamente la misma placa que el anterior (en el MAME lo marcan a un clon de otro), este es el típico póquer.. aún más feo que los dados. Curiosamente, esta misma placa sirvió para siete u ocho juegos de poker más.

¡Se habrá quedao descansado el croupier con estas cartas!

Dicen que las empresas pequeñas, con el tiempo cierran o evolucionan, es curioso ver como pequeñas compañías como esta, siguen vivas hoy en día, aunque se dediquen a reparar “Frío Industrial”, que poco tiene que ver con las recreativas. El caso, es que por lo menos, los dos juegos de ITISA Palamós, son bastante originales.

1- Botanic (1983)

  • Tipo: Arcade “Pacmanero”
  • Equipo: Henk Spits, Josep M. Petit, Josep Morillas

La verdad, es que encontrarme con este pequeño arcade, ha sido una sorpresa bastante agradable. Botanic es muy parecido a Pac Man, pero en vez de recoger puntos, morfamos hojas de ¿morera? con un gusano de seda, yendo de rama en rama de un árbol repleto de arañas y otros bichos con muy mala uva. Lo cachondo, es que no sabemos a ciencia cierta, si las ramas están comunicadas entre si hasta que cogemos la hoja correspondiente.

¿Donde se esconde ese gusano de Martínez?

Divertido, original dentro de lo que cabe, y sobretodo jugable y adictivo…pero dudo que haya tenido mucho éxito en su época, aunque lograron que Valadon (los franceses que diseñaron el famoso Bagman) se lo distribuyera en Francia, lo que lo convierte, seguramente en el primer arcade español que atravesaba las fronteras de nuestra península.

2- Squash (1984

  • Tipo: Deportiva (Pong camuflado)
  • Equipo: Henk Spits, Josep M. Petit, Josep Morillas

Segundo y último juego conocido de esta empresa catalana, Squash, no es más que una nueva versión del “Frontón” de las primeras consolas caseras, pero con mejores gráficos.

El control es una cosa rara (aunque no se si es problema de la emulación), y si le marcamos al contrario será de pura churra más que de habilidad.

¡Tengo el baile de San Vito!

La “Edad De Oro”

Después de estos inicios tan pocos halagüeños, los fabricantes españoles se pusieron las pilas, y surgieron algunos de los arcades más memorables de nuestra historia (algunos más famosos en el extranjero que en España)… aquí hay de todo y para todos los gustos.

Situada en L´Hospitalet de Llobregat, Tecfri es una de las primeras empresas en dejar una huella “internacional” bastante destacable, con juegos divertidos, y bien realizados a nivel técnico que se vendieron bastante en el extranjero.

Casi todo el personal técnico de Tecfri, pasó a formar parte de Gaelco al pasar los años.

1- Ambush (1983)

  • Tipo: Matamarcianos multifase
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

Sin duda, el primer juego del que tenemos una ligera memoria, es este de Tecfri, programado por nada menos que el creador del World Rally, logró distribuirse en Japón a través de Nippon Amuse.

Ambush es un matamarcianos relativamente simple, realizado simulando un efecto 3D (parecido al del Space Harrier), en el que primero, deberemos despegar nuestra nave, algo muy chungo si nadie nos ha contado, que para hacerlo hay que acelerar hasta 300 KM y luego pulsar hacia arriba.

¡Pistaaaa, denme pistaaaa!

Una vez despeguemos, nos enfrentaremos a una serie de oleadas bastante fáciles, que van desde asteroides, pasando por platillos volantes, y algún que otro homenaje (por lo menos en cuanto a la formación se refiere), a Galaxian.

Una vez hayamos vencido a las oleadas correspondientes, tendremos que aterrizar la nave, operación, bastante más complicada que el despegue.

¡Deja de moverte, jopé!

Los gráficos no son nada malos teniendo en cuenta el año, y los enemigos se acercan con un suave efecto de zoom, si a esto le agregamos que todo se mueve muy bien, y que incluso podemos acelerar y frenar la nave en todas las fases, tendremos un juego más que digno.

Y yo, tengo piedras en el Riñón…

La única pega que puede tener Ambush, es la casi ausencia de efectos de sonido, ya que los pocos que hay, se escuchan tímidamente en contadas ocasiones.

2- Buggy Challenge (1984)

  • Tipo: Conducción
  • Equipo: Desconocido

Distribuido por Taito en Japón y Tecfri en España, Buggy Challenge es un juego que teóricamente programó Taito, pero las similitudes en el control y la placa usada me hacen sospechar que este divertido arcade, fue programado en España y no en Japón.

Prescindiendo de las dudas existenciales, estamos ante un juego bastante divertido y original, y más si tenemos en cuenta que es anterior al ya famoso Buggy Boy (y se parece mucho).

¡Que me como la piedraaa!

El juego es bastante cachondete, y su objetivo es muy simple, recorrer una fase antes de que se nos termine la gasolina, que podremos ir recargando si pasamos por las “puertas de control”.

Lo bueno, es que las fases no tienen la pista limitada, y podemos ir por donde nos salga de las narices, pero es recomendable seguir las flechas de marcador, que nos indican los puntos esenciales del recorrido, como las puertas y los puentes.

Este se ha comprado el coche en el mismo concesionario que yo…

Además de ser innovador en el desarrollo del juego, también tiene otras cosas que debieron resultar alucinantes en su época, como la posibilidad de pegar impresionantes saltos con el coche si nos dirigíamos a algo como una roca, y las derrapadas que pegamos en las curvas.

Los gráficos están bien, animados con bastante gracia, y el sonido es un poco pesadote, sobretodo los bocinazos que pegan los otros buggies al adelantarnos, que parecen más bien del camión de reparto de la SEAT.

Con un morro que se lo pisaban, la gente de Ocean, realizó una conversión de este juego sin pagar ni un duro, y lo llamó “Nightmare Rally”, que es exacto en casi todo, sólo que al pasar por ciertas puertas se da la vuelta al decorado y conducimos boca abajo, y que en vez de un Buggy conducimos un cascajo de Rally.

Igualico, pero con el coche de la suegra…

Extras: Nightmare Rally versión Spectrum.

3- Crazy Rally (1985)

  • Tipo: Conducción/Arcade
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

Desde luego, si hay algo de lo que no podemos acusar a los señores de Tecfri, es de repetir fórmulas y estilos de juego en sus recreativas. Para este Crazy Rally, tomaron inspiración de máquinas como el legendario Monaco GP de Sega, y le agregaron sus propias ideas, quedando uno de esos arcades que a pesar de su sencillez gráfica, aún me sorprende con originales detalles.

Otro adelantamiento como este.. y a parir monas mis «puntos»

La mecánica del juego es simple como ella sola, llegar al final de cada fase, en el tiempo estipulado y sin que se nos termine la gasolina, pero lo bueno de esto, es en Crazy Rally se tomaron las molestias para nos parezca que de verdad estamos corriendo en una carretera (dentro de las limitaciones de la época, claro).

Si os pensáis que todo es tan simple como adelantar al fulano que se os ponga delante, lo lleváis claro, ya que nuestros adversarios, además de adelantarnos, perderán aceite, sacarán humo, chocarán entre si… en definitiva, nos harán la vida imposible.

Ni a la ambulancia pienso dejarla pasar…

4- Hole Land (1984)

  • Tipo: Matamarcianos
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

Que no os engañe el aspecto de arcade resultón de este título, Hole Land, no es más que un matamarcianos por oleadas camuflado. En este juego tendremos que ir liquidando una serie de bichos que se esconden en hoyos (de ahí el nombre), justo en el momento en que se asomen a la superficie. Si alguno de ellos logra llegar a la parte baja de la pantalla, intentará hacernos “pupita”, y si puede nos llevará “al otro barrio”, o sea, que si nos pilla un enemigo, nos trasladará a una especie de “inframundo” en el que los bichos se mueven aún con más mala leche.

Estos de Obras Públicas, nunca tapan sus agujeros…

Además de la exasperante velocidad de los enemigos, nos disparan, y si nos cae una bala (o lo que sea), encima, nos estropean el robot, pero un señor con gorra y bigote (el primo catalán de Mario), nos lo arregla dándole al gato (o sea, dándole nosotros al gato).

Conforme avanzamos, más rápido se mueven los condenados, pero por suerte, no en todas las fases hay agujeros, y en alguno de los decorados, los bichos estarán solos delante de nuestro robot, y durarán menos que en una anuncio de Raid.

¡Pero que poca puntería tengo, leches!

Gráficamente, me gusta bastante, y no se repite mucho, pero sobretodo es adictivo, e intuyo que habrá soplado unas cuantas monedas de cinco duros a la concurrencia fuera española o japonesa en donde también se distribuyó esta placa.

¡Hay un «topo» en nuestra organización!

5- Sauro (1987)

  • Tipo: Matamarcianos en remojo
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

Un año antes de “The Deep” (quizás el primer matamarcianos submarino conocido), los chicos de Tecfri se atrevieron con un juego que técnicamente estaba adelantado a su época, pero que una vez más se arruina por completo por la inexistente curva de dificultad.

Con lo agobiantes que son las fases.. los jefes finales te dan un respiro

Si ya de por si, es un poco claustrofóbico moverse por una ambiente submarino, imaginaos siademás de esquivar las balas de los enemigos, tenemos que sortear los restos de estos, sin chocar con ninguna roca o saliente, ¡vaya tela!

Sauron es tan difícil que la gente del “MAME Team” piensa que es un bug.. (un bug que nosotros conocemos muy bien, llamado “juego Español”).

La fase del avión nos permite respirar un poco más.. ¡si llegamos!

Técnicamente, el juego es impecable, con scroll suave, gráficos adelantados a su tiempo y es muy variado, el sonido no está nada mal tampoco, e incluso tiene digitalizaciones de voz(premio para el que las entienda). Contamos con muchos tipos de armas para escoger, hay enemigos de final de fase, e incluso contamos con alguna fase en que la acción se traslada al aire, convirtiéndose el submarino en un avión (lo que suaviza bastante la dificultad).

6- Speed Ball (1987)

  • Tipo: Pinball
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

Desde las recreativas más antiguas, los programadores han intentado clonar con más o menos fortuna, la mecánica, apariencia y diversión de las mesas de Pinball, y salvo honrosas excepciones, hasta principios de los noventa, hemos tenido pocos ejemplos dignos.

Casi contemporánea al “Time Scanner” de Sega. Speed Ball es una de las mejores simulaciones de Pinball que se pueden encontrar en recreativa, e incluso hoy, resulta muy divertida de jugar.

Aunque no fue la primera en incluir varias mesas (ya lo hizo Pinball Action dos años antes), si que es la primera que nos deja escoger la mesa, y no tenemos que “currarnos” el acceso a través de bonus u objetivos de fase. Eso no quiere decir que no pasemos de mesa durante el juego, si completamos una serie de objetivos.

Además de la pinta y sus buenos gráficos, el movimiento de la bola está tremendamente conseguido, y salvando las distancias, nos sentiremos como si en un pinball real estuviéramos (un pinball de los 80, claro), para mi, Speed Ball es la mejor máquina de Tecfri.

Como dato curioso, comentaros que no existe ningún muelle para lanzar las bolas, salen justo en medio de los flippers, pulsando el botón correspondiente.

7- Tricky Doc (1987)

  • Tipo: Arcade
  • Equipo: Javier Valero, Josep Quingles, Luis Jonama

En Tecfri, no estaban intimidados ni cohibidos por ningún género en particular, por eso, también se atrevieron con los plataformas, con el único juego de la compañía que recuerdo (porque estaba en el cuartel donde hice la mili), aunque nunca llegué a gastar mis monedas en él.

¡Que mal huele aquí abajo!

El protagonista, es un científico tronao al que se le han escapado sus creaciones genéticas por todas las fases. Por supuesto, nuestra misión es volver a encerrar a todos nuestros experimentos (algo que nunca sucede, porque entra en un bucle a partir del nivel seis).

El sistema de juego, y la perspectiva utilizada, me recuerdan muchísimo a Bonanza Bros, y elestilo de los gráficos tiene un aire a “Goody”.

El malo no es feo.. es incómodo de ver

Tricky Doc, recorrerá seis niveles repletos de enemigos que van a toda leche, esquivándolos, saltando, subiendo por los cables y rociándolos con un espray.

Una vez más, todo es destacable menos la dificultad, que se me antoja demasiado elevada, por suerte, con el MAME las cosas son mucho más sencillas.

¿Habré calculado bien el salto?

9 comentarios sobre «Los Patitos Feos del Software Español 26 (I): «Patitos» a cinco duros»

  1. Fantástico artículo como siempre por parte de mi colega The Punisher.

    Desconocía hasta el momento la existencia de tantas compañías españolas involucradas en el mundo de las recreativas.

  2. ¡Yo jugué al AMBUSH en su día! Recuerdo que fueron los 5 duros más desaprovechados de la historia, pues no conseguí despegar y se acabó la partida.
    El del bar me conocía y me preguntó y le dije que no sabía qué había que hacer en la máquina… duró dos telediarios allí xDD

  3. Es increible…. Todas las recreativas que comentais (o casi todas) han pasado por mis manos.
    En el bar de abajo de mi casa llegaron a poner el Hole Land y el Sauro; la primera jugaba «to dios», en cambio la segunda duró menos que 1€ a la salida de un colegio.
    He de decir que me he quedado blanco cuando he visto que Tecfri era española; por cierto, no habeis nombrado Explomatic (aqui distribuyó el Phoenix de Amstard, llamado Fenix que curioso y tambien el Moon Cresta)

  4. Echo en falta una que se llamaba NIGHTMARE y alguna compañia la distribuia como CHUBY.De hecho,hace tiempo que la busco y no aparece por ningún lado…

  5. Punisher, he leído tu articulo, si quieres saber mas cosas y ampliar sobre lo escrito, ponte en contacto conmigo.

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