El Rastro madrileño, fue, de la misma manera que el Mercat de Sant Antoni en Barcelona, germen de gran cantidad de compañías de software de la época de ocho bits, y ahí se dirigieron los jóvenes Javier Cano y Emilio Martínez, con la esperanza de poder venderle a alguien su juego educativo. En el pintoresco mercado madrileño, contactaron con un representante de Erbe, que se interesó por su juego. Había nacido Erbe Software.
Ese juego educativo, del que hablaré más adelante, sirvió a la distribuidora como prueba de mercado para ver si esto de la producción propia de juegos les iba a salir bien, y las pruebas fueron satisfactorias, ya que tras los primeros juegos, Erbe Software mutaría en la entrañable “Topo Soft”.
Para variar, estos primeros juegos fueron sobre valorados por la prensa del momento. ¿Cómo no iban a puntuar más alto de lo que se merecen los juegos lanzados por la distribuidora líder en España?.
Pasad a conocer sus juegos (sin valoraciones de Micro Hobby)…
Enlace: Historia de Topo Soft (Meristation).
The Wall (MSX) (1985)
- Tipo: Arcade saltarín
- Autor(es): Desconocidos
- Puntuaciones: MSX Magazine (5,25 media)
Después de estrenarse con un glorioso simulador de la Lotería Primitiva, es posible que este sea el primer juego de Erbe para ordenadores personales. Un arcade del que hay muy poco información en Internet, y se excluye en todas las retrospectivas hechas a la compañía, y desconozco el motivo, porque “The Wall“, aunque no es la octava maravilla, está bastante en la línea de los juegos para MSX 1 de la época.
En el, tenemos que ir cogiendo objetos al mismo tiempo que avanzamos por un muro, saltando de un lado para otro. Su fallo más gordo, es obligarnos a pulsar dos teclas (diagonal), para poder movernos en las paredes angulares, lo que complica el juego sobremanera, a la hora de pasar de una pared recta a otra que no lo es. En pocas palabras, una dificultad malsana, que no hace más que confirmarme que se trata de un juego español y no se un hack al estilo de los de Iber (eso y que me he repasado enterita la lista de juegos publicados para MSX para ver si encontraba otro similar).
No deja de resultar curioso que el muñeco principal se parezca muchísimo al protagonista de Profanation, que fue copiado en un buen número de plataformas hispanos de la época.
Las revistas de MSX de la época se hicieron eco de este juego español, y le dieron puntuaciones regularcillas, destacando su ¿originalidad?, como punto fuerte.
Enlaces:
Whopper Chase (Spectrum, Amstrad, MSX, Commodore 64) (1987)
- Autor(es): José Manuel Muñoz (Spectrum), Emilio Martínez (Amstrad), Jesús Medina (C64), Carlos Arias (MSX), Julio Martín (Gráficos), Cesar Astudillo «Gominolas» (Música)
- Puntuaciones: Micro Hobby (6,5 media)
El negocio de los “advergames“, sigue siendo una fuente de ingresos considerable para las pequeñas compañías de videojuegos, y muchas de ellas sobreviven sólo con este tipo de juegos. En los ochenta, este campo apenas de había explotado en unos cuantos juegos (Pepsi Invaders para Atari 2600), y desde luego en España era algo completamente nuevo.
Whopper Chase, desde luego, fue el primero lanzado de manera masiva en España, y que podíamos conseguir para cualquiera de los ordenadores de la época, por el módico precio de un Whopper, lo que tampoco evitó que estuviera en las listas de los piratas, que si mal no recuerdo, lo regalaban al comprar otro juego.
La realización de este juego, supuso todo un reto logístico a Erbe, que lograron tener el arcade terminado en tan sólo una semana, en todas sus versiones. Un trabajo titánico para el personal de la compañía, que se iba a ver reflejado en un juego corto, difícil y bastante regularcillo en líneas generales.
El juego es absolutamente simplón en su concepción, y se basa en la idea de “aguantar” sin que nos maten en una pantalla, e ir recogiendo los cuatro pedazos del logo de Burger King, para terminar el juego. Lejos de lo que pueda parecer al jugar con el, ni siquiera es necesario que nos movamos de pantalla para lograrlo, ya que poco a poco, los codiciados pedazos irán cayendo conforme vayamos “cocinándonos” a los enemigos.
En cuanto a las versiones, me quedo sin duda con las de Amstrad CPC y Commodore 64, con mejor sonido y gráficos que las anteriores.
Lo bueno de todo, era que por un sólo Whopper, tenías todas las versiones, lo que permitía incluso que con una “compra compartida”, todos los amiguetes tuvieran juego gratis para pasar una tarde entretenida.
Whopper Chase, fue puntuado en Micro Hobby, algo que hoy en día sería imposible, por lo menos, no sin poner la típica advertencia de “PUBLICIDAD” antes del artículo.
Extras:
Ramón Rodríguez (Spectrum) (1986)
- Autor(es): José Carlos Arboiro Pinel
- Tipo: Plataformas “manicminero”
- Puntuaciones: Micro Hobby (7,3 media)
A pesar de que los análisis de la época comparaban a este juego con “joyas” del software patrio como Camelot Warriors, la verdad es que las similitudes eran más que cosméticas, ya que en tan simpático arcade, la libertad de movimientos era algo mayor (el CW tenía tanta libertad como el Dragon´s Lair) y los enemigos no agobiaban tanto como en el juego de Dinamic (por lo menos dejaban respirar un pelín más). Más bien creo que estamos ante un “Manic Miner” pero con los gráficos grandotes y con mucho color. Es como si Don Priestley hubiera diseñado un juego de plataformas.
Por desgracia, tras una resultona fachada gráfica y sonora, nos encontramos con más de lo mismo.. Un arcade en que si no reaccionamos rápido nos chupan las vidas una trás otra desde que aparecemos en la primera pantalla, y que nos obliga a calcular nuestros movimientos y maquinar imposibles caminos para pasar de una pantalla a otra. Algo que unos cuantos años atrás aún tenía un pase, pero que para 1986, se me antoja un tanto anticuadillo (no me extraña que los British vapulearan el Camelot, yo habría hecho lo mismo).
Un jueguecillo para pasar el rato, pero no para un notable alto como el que le encajaron los amiguetes de Hobby Press.
Extras:
- Descarga
- Ficha en CEZ
- Análisis de Micro Hobby
Mapgame (Spectrum, Amstrad, MSX)
- Tipo: Juego educativo
- Autor(es): Javier Cano y Emilio Martínez
Aunque supongo que todos estamos de acuerdo en que Mapgame no es ninguna maravilla lúdica, lo cierto es que este modesto programa educativo, camuflado como juego, es uno de los culpables del nacimiento de Topo Soft, o por lo menos de la Topo que conocimos, ya que entre sus autores, se encuentra nada menos que Javier Cano, auténtico motor de la compañía y tremendo programador de los primeros tiempos de Topo.
Concebido como si de un concursillo de esos que nos hacía nuestro profe de Geografía en la clase, en este programa, se nos presentarán mapas de capitales, ríos y montañas, y deberemos acertar la opción correcta de entre las que nos dan a elegir, ni más ni menos.
El primero que llega a cien puntos, gana, o eso supongo, ya que el juego ni siquiera se molesta en declarar un ganador entre los participantes, sólo deja de preguntar cosas.
Los más empollones, tenían la posibilidad de consultar con la base de datos del programa, para averiguar lo que necesitaran, pero vaya, si tengo que pasarme 4 minutos para cargar, como en MSX, antes miro un Atlas y acabo antes.
Las versiones, son casi clavadas, con alguna diferencia gráfica y un par de efectos de sonido que no aportan nada de nada.
Como curiosidad, Map Game fue uno de los pocos juegos que aparecieron en la sección de “Nuevo” de Micro Hobby, sin puntuación ¿intentando engañar a alguien quizás?.
Extras:
- Descarga
- Ficha en CEZ
- Review Micro Hobby
Tres Luces de Glaurung, Las / Conquestator (1986)(Spectrum, Amstrad, MSX)
- Tipo: Plataformas “ultimatero”
- Autor(es): Javier Cano, Emilio Martínez y J. Manuel Muñoz (Spectrum y Amstrad), J. Manuel Garde, Carlos Arias Alonso (MSX)
- Puntuaciones: Micro Hobby (media 8), Popular Computer Weekly (3/5), Crash (65%), Computer & Videogames (media 8,25), Sinclair User (1/5), Your Sinclair (9/10)
Tiempo ahora de hablar del juego estrella del catálogo de Erbe, “Las Tres Luces De Glaurung“, un arcade de los de encontrar objetos, que fue objeto de un “hype” de aúpa, en especial en Micro Hobby.
Las primeras apariciones de este juego, fueron pantallas insertadas en un tutorial de programación aparecido en la revista, en donde se alababan sus gráficos en ¿Filmation? y de paso nos iban calentando la cabeza con el juegazo que se nos venía encima.
Luego, vimos una misteriosa publicidad que nos adelantaba el interesante argumento del juego y lo mencionaba como el juego que “está sorprendiendo a Europa”, algo, que como ya veremos, era una verdad a medias.
Un análisis en MH que se deshacía en elogios a los programadores y a la compañía, alabando los gráficos, desarrollo y la cuidada ambientación, pero.. ¿era para tanto?, la verdad es que no.
“Las Tres Luces”, estaba claramente inspirado de juegos como Under Wurlde, del que tomaba la estructura y algunos sonidos prestados, constituyendo un programa muy bien realizado a nivel técnico, sólo tenía algunos fallos de detección puntuales entre los enemigos y nuestras flechas, pero nada que llegara a ala altura de los clásicos de Ultimate ni de otros plataformas clásicos de los ocho bits.
En el, tenemos que recorrer las estancias de un castillo, buscando tres joyas (las tres luces), y una llave que necesitaremos para salir de la fortaleza. Para vencer a los enemigos, debemos saltar encima de ellos, a lo “Joust”, o sea, el que salta más alto aplasta al contrario, o también podemos usar nuestras flechas (limitadas), que nos servirán para liquidar a casi todo, menos el Mago y el Dragón.
El mapa que tenemos que recorrer es bastante grande, y aunque las decoraciones de fondo y los detalles no son muchos, por lo menos cumplen el cometido para que podamos diferenciar las distintas zonas del castillo.
Los gráficos, son bastante potables y cachondetes, destacando el sprite de nuestro protagonista cuando se convierte en Dragoncete y esos teletransportadores que parecen sacados de las “Historias Fermosas” del insigne Fer.
Sonoramente, creo que sólo vale la pena destacar la bella melodía del principio, ya que los efectos en el juego son más bien normalillos, desde luego no merecen el ocho que les encasquetó Micro Hobby.
Las versiones, son casi tres gotas de agua, se nota que la principal fue la de Spectrum y que luego se hicieron las conversiones a Amstrad y MSX por el método “maricón el último” (conversiones en dos días o menos), tan usado en aquellos tiempos.
Vale la pena que os leáis los análisis de las revistas en especial de las inglesas, ya que encontraréis alguna puntuación a todas luces exagerada y otras en que se nota que no nos trababan mucho a los “spaniards”. En cuanto a la review de Micro Hobby, a parte de la “ida de pinza” del texto en general, me es curiosa la insistencia en que “Las Tres Luces” era el primer producto de Erbe.. claro, como ni siquiera habían puntuado el Map Game..
Extras:
Y hasta aquí llegó el número 32… aún nos queda un buen trecho “patitero” para recorrer.. ¿estaréis preparados?…
Con las tres luces me lo pasé estupendamente ^_^ Igual le meto este finde otra vez. Podriamos hacer un «club de lectura» de juegos MSX para cada semana XD
Yo tuve el de «The Wall» en su día y me suena incluso habérmelo acabado. No lo recuerdo como un juego malo, pero sí bastante simple, aunque se agradecía que fuera una versión sólo para MSX y no una conversión cutre de Spectrum, como el Whopper Chase, por ejemplo.
Con el Whopper Chase se podría haber cebado más, puesto que era malo, malo, malo de narices (sólo se salvaba la música de Gominolas), pero supongo que la comida basura sólo se podía merecer un juego basura, injugable total… ¿Alguien consiguió pasar alguna vez de la primera o segunda pantalla?
Con Las tres luces de Glaurung pase muy buenas tardes, era divertido y jugable, (no extremadamente dificil) y el mapa era muy extenso. The wall tambien lo jugue, un poco dificil, pero no me parece mal juego, al menos tenia colores 🙂 Los dos fueron regalos (originales) creo que en las Navidades del 1986, iban en estuche tipo pelicula VHS pero de tamaño mas pequeño.
Yo les doy un diez por la nostalgia que me traen 🙂 El whopper Chase me lo dejo un amigo del cole que tenia Amstrad, pero como en la cinta venian todas las versiones pude jugarlo en mi MSX, (Olé!) El juego era malo, pero la idea de poner todas las versiones (Spectrum,C64,Amstrad y MSX) en una cinta me parecio muy buena, debian haberlo hecho asi con mas titulos!!! 😉
Gracias por compartir esta información.
Saludetes. 😉